Resulta que en algún momento algunos hombres pensaron que el "bajar" las ideas de su mundo al de la materia era el arte en su forma más plena.
En el otro extremo, la pura improvisación y las maravillas del surrealismo y el jazz.
De un modo, del otro o de cualquiera de las maneras intermedias o alternativas... el hacer es central.
Creemos que creamos cuando de nuestras mentes salen efluvios más o menos interesantes u organizados.
Creemos que creamos cuando algo se ajusta muy precisamente a lo que alguna vez imaginamos...
Pero no. MANDA LA REALIDAD.
Podemos tener ideas, podemos intentar toda la precisión, podemos hasta discutir con esta o aquella tendencia...
Pero hay una PURA BELLEZA que surge del hacer...
De una imagen puede nacer otra... De un objeto puede nacer la idea de otro... De una idea embrionaria de una persona puede nacer la obra íntegra completada por otra.
El arte en progreso, el arte en proceso, el arte que gesta su vida propia pasando por manos diversas...
En algún tiempo el arte representaba, en el mundo moderno presentaba... hoy SE PRESENTA.
Y nos trasciende a todos... Más allá de egos y de pequeñas famas... Más allá de manifiestos y planes de trabajo... El arte, vivo, nace obra sin pedir permiso. En el diseño, en la vida cotidiana, en el registro de una mirada, en la fotografía más impensada, en la joya más austera, en el movimiento más sutil...
