Alguna vez pensé en escribir 365 reflexiones, una por día, durante un año, sobre la creatividad y sus procesos...
Tardé mucho más. Y ya no quiero que sean solo 365.
La búsqueda de la creatividad es en sí misma un acto creativo. Y forma un camino. Que se cruza con miles de otros caminos y entre todos forman una red.
Esa red es flexible, porque si se rigidiza se rompe.
Es invisible, hasta que se hace obra o poema, o proyecto o plan o canción...
Quiero transitar esa red, andar libremente por sus caminos...
Este blog, que es un libro, que es pensamiento en movimiento, que es un diálogo con vos, que muestra solo "fotos" de momentos de claridad (o de la falta de ella) es lo que seguiré escribiendo.
Sin pretensiones de recetas cerradas, sin definir como verdad revelada ningún concepto... pero abriendo todas las puertas posibles y dejándolas abiertas. Para que corra el aire. Para que entre el sol.
Compartir lo producido es como plantar una semilla. Esa semilla es el principio del resto de la vida.
Porque canta un silencio fértil de posibilidades, porque transmite esa energía que toma forma cuando el artesano entra en su taller. El científico en su laboratorio. El poeta en la naturaleza. El hombre común en el mundo común. El caminante en su camino.
Yo en mí mismo. Vos donde quieras... Las puertas están siempre abiertas.
